Que lo de ayer no tiene mucha justificación no hace falta decirlo, pero que los trallazos que la prensa receta son de órdago si que me llama la atención. Por supuesto que si Adolfo y Victorino se han convertido en los mejores pagados de Madrid es a los que más se les debe exigir, sobre todo tras llevar varias corridas tan decepcionantes. Ahora bien, analicemos fríamente el juego de los toros de ayer. Con los casta justa, demasiado justa, ninguno rompió de verdad; pero, ¿ayudaron los toreros a la corrida? Mientras para poner un toro al caballo hagan falta trescientos capotazos, entres los cuales hay cincuenta enganchones, no se les temple su embestida y se le den trallazos y medias vueltas innecesarios mal vamos. Con los de ayer o con cualquier otro. Ya he dicho que no tiene mucha defensa la "adolfada" de ayer, llamada por muchos moruchada, y no muy lejano a ese calificativo los demonimé a mis compañeros de viaje porque hay detalles que no se me escapan, ni pueden escapar a ninguno que se fije en todas las reacciones del toro. Desde que sale de chiqueros hasta que muere. ¿Alguno remató en tablas? Dos de ellos se estrellaron contra los burladeros pero porque querían saltar al callejón, y otro no hacía más que barbear tablas buscando una salida. Algunos escarbaron, la mayoría esperaba y acortaba descaradamente en banderillas, ¿falta de casta o falta de fuerza? Varios doblaron en tablas, y los que aguantaron en el tercio tragándose la muerte, al final miraban hacia dentro. La mayoría cumplió en el caballo, sin ser cosa del otro mundo pero bueno.
Después de todo esto, ¿ayudaron algo los toreros? Ninguno de los tres dio lo que, personalmente, me pareció que debería de haber dado. Excepto Rafaelillo en el segundo, que era un "hijoputa", pero es que el quinto ni lo vi, sobre todo por el izquierdo. Y el último, de López -Chaves, también me quedé sin verlo. ¿A que venía ese quite de el Fundi con enganchón y trallazos?
Pero sobre todas las cosas lo que más me preocupa es que en los últimos tiempos salten al ruedo toros de este encaste tan sosos y sin ninguna transmisión. No quiero que empiecen las comparaciones, sería un triunfo del "sistema" y eso no creo que sea lo que quieren ni Adolfo ni los Victorinos. ¿O si?
Espero, deseo y sé que no.
6 comentarios:
Pues ami Vizente el segundo si que me gusto,y mucho,los toros con mala ostia. Aunque el resto,quitando un poquito el quinto me parecieron muy sosos,y dentro de lo que cabe faciles. Pienso que rafaelillo no le pudo al segundo,y le engancho por que me parecio que en el segundo muletazo se quedaba fuera de juego,me parecio que no andaba sobrado de tecnica,pero a Zaragoza voy a verlo del tiron. en el segundo estaba todo emocionado(fui a la plaza)emocion,pero agusto de emocion.
Hola Vicente
A mi de verdad no me preocupa la casta en estas ganaderias, hay reserva para mucho, además el toro encastado unas veces rompe y otras no, también está condicionado de todo lo que aprende durante la lidia, (el resto de encastes suele aprender poco o nada), pero si me preocupó una cosa, la falta de fuerzas, demasiados toros blandearon. Y eso es mala novedad.
Un saludo.
A otros toros, con los mismos motivos no le hubieran dado tanto la prensa como a estos..pero así están las cosas.
Un saludo.
Pero Roberto, es verdad que ya van varios petardos seguidos...
Yo separaría nítidamente el caso de los "Adolfos" del de los "Vitorinos". El primero teniendo una ganadería corta ha ganado cartel en Madrid y tiene que aprovechar el momento y lidiar todo lo que tiene -bueno o malo- en las Ventas.
Los "vitorinos" no me preocupan. Una ganadería larga tiene de todo en la despensa. Ellos pueden elegir entre ofrecer guindillas o bombones, pero si se empeñan en sacarte de todo, hasta algún alimento en no muy buen estado...
Yo no matizo tanto el asunto, la corrida para mi gusto fue mansa, y punto.
La condesa de Estraza
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