AÚN QUEDAN ...

Hacía tiempo que no veía una corrida como la que se ha celebrado hoy en Cenicientos con reses de José Escolar. Toros duros y encastados. Cambiantes algunos y bravos otros. Interesantes todos, que no es poco en los tiempos que corremos. Pero si me he alegrado por algo es por haberla grabado. El quinto, de nombre Campanillero y muy en “Albaserrada”, ha sido un toro BRAVO con todas las letras. Ofensivo, con hechuras, y rematando abajo en los burladeros de salida. Se comía todo los capotes que le pusieran y el pobre Sergio Martínez se quedó blanco al ver embestir aquel bicho. Mal puesto en el caballo ha tomado dos puyazos con fijeza y metiendo los riñones. Me hubiese visto arrancar desde los medios, porque estoy seguro de que lo habría hecho con gran alegría. Durante la lidia ha quitado hasta 6 capotes de las manos del matador y los subalternos. La muleta la tomaba con largura y codicia si se le presentaba bien. No ha abierto la boca y ha doblado fuera del tercio cuando se ha visto herido de muerte. Recibió merecidamente la vuelta al ruedo. Un toro con el que sueñan los ganaderos que aman su profesión y los aficionados que van a ver toros bravos, pero no creo que sea con el que les gustaría encontrarse cada tarde a los toreros. Muchos se irían para casa. ¡Ojalá saliesen más como este todos los días!