El sábado en El Gustal De Campocerrado disfrutamos de un día muy completo. Ángel, el hijo de Fernando Madrazo Arranz, se atrevió con un eral y nos regaló una faena campera y poderosa. Encastados los dos como no podía ser menos teniendo sangre Arranz. Después de esto disfrutamos de una buena parrillada, de excelentes productos riojanos y de los estupendos vinos de la familia Gurpegui y de otras bodegas de Calahorra.
Ayer estuvimos en Valrubio, donde algunos, los que nos atrevimos a pasear entre las vacas ya que el cercados de los machos estaba algo lejos, pudimos ver los novillos que José Luís tiene preparados para la próxima temporada. Espectaculares pelajes, bonitas hechuras y cabezas sin exageraciones como corresponde a el encaste Vega-Villar. Comida bajo un par de encinas centenarias, corrillos de aficionados, fotos para el recuerdo y despedida.
Han sido dos días rodeado de esta buena gente que sabe que en esta tierra tienen un amigo para lo que sea menester.
P.D.- Diego, se te echó de menos.
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