ORGULLO DEL CAMPO CHARRO: SEPÚLVEDA

La historia ganadera de esta familia comienza en 1942 cuando Don Ignacio Sánchez y Sánchez compra cuarenta vacas y dos sementales a Don Juan Sánchez de Terrones. El nombre elegido para anunciar esta vacada fue el de la finca donde pastaban: “Sepúlveda de Yeltes”.
A últimos de los cuarenta y durante los cincuenta los toros contreras de Don Ignacio fueron muy solicitados por las figuras de esos años. En 1958 la mitad de la ganadería fue adquirida por Don José Finat, Conde de Mayalde, que se llevó el lote adquirido a tierras toledanas.
El 11 de Julio de 1960 fallece el bueno de Don Ignacio y heredan finca y ganado sus hijos Pilar, Luis y Antonio Sánchez Ortiz de Urbina. Es este último el que se queda con la denominación en los carteles que usa para un hierro que compró sin ganado en 1965, el que perteneció a Anastasio Martín con antigüedad de 1844 - la octava de España y la primera de Salamanca -. El hierro original es usado ahora por sus hijos para la ganadería de “Sánchez-Urbina”.
Antonio “Sepúlveda”, como era conocido por todos, comenzó a eliminar los contreras que le correspondieron y en 1967 compra ganado a Javier Solís de Casablanca, procedentes de Juan Cobaleda – cuñado de Atanasio Fernández-. Diez años después adquiere al Mago de Campocerrado un lote de vacas y el semental Malagueñito. Meses más tarde es el toro Gironero, de Lisardo Sánchez, el que llega a Sepúlveda para padrear.
En 1979 el toro Recluso fue premiado como el más bravo de la Feria de Valencia y al año siguiente Escultor resultó el mejor toro lidiado durante toda la temporada en Barcelona. Pero el destino no quiso que Antonio viera como su trabajo y sabiduría iban a tener mucha más recompensa. En 1980 fallece siendo aún demasiado joven y son sus hijos los que continúan su obra, él dejó todo bien encaminado.
En 1984 Pajarero fue el ganador el Toro de Oro de la concurso de Salamanca y Campesino lo fue al año siguiente. En 1986 añaden vacas y sementales de Santiago Martín, “El Viti”, de origen lisardo.
El despegue total de la vacada comienza a últimos de los ochenta y dura hasta medidos del 95, año en el que la ganadería sufre un profundo bache del que no se logra recuperar. Muchos son los éxitos obtenidos durante ese periodo: Canastillo obtiene en 1989 otro Toro de Oro; Enrejado II es premiado por el Ayuntamiento de Madrid como el animal más bravo del San Isidro de 1989; Jaquerito fue indultado en Francia en ese mismo año; Soñero fue desorejado por Ortega Cano en los sanfermines de 1992; en Valencia se lidió una excelente corrida en 1993 en la que destacaron Judío, Tentador, Cigarrero y Tramposo; en esa misma temporada saltaron en Bilbao dos grandes toros llamados Campesino y Delicado; en 1994 se lidiaron en Madrid tres buenos astados cuyos nombres eran Tramposo, Hospedero y Campesino; en el 96, 98 y 99, respectivamente, fueron ovacionados en su arrastre por el albero de Las Ventas Tabaquero, Cubo y Tramposo.

En la actualidad “Sepúlveda” se encuentra en una profunda crisis, no lidia en ferias importantes y no sabe hacia donde navegar, sí hacia el pasado - glorioso- o hacia el futuro. En 1997 sus propietarios compran vacas de Aldeanueva y El Torreón con las que crean la ganadería “Toros de Sánchez-Urbina”. Para “rematar” en 2004 añaden a las “sepúlvedas” dos sementales de Daniel Ruiz, que nada tiene que ver con el origen de la vacada.
Antonio “Sepúlveda” no estaría muy contento viendo en que se está convirtiendo su sueño. Otro de los orgullos de Salamanca se pierde. Espero que puedan recuperarlo.