Escribe Javier Villán hoy en El Mundo:
…“El perfil de figura dependerá en venideros años del perfil de toro que seamos capaces de exigir. Cuando se discute el indulto de Idílico –en una Barcelona compulsivamente tomasista mas perdida ya para la Fiesta- y se ensalzan los victorinos u otros encastes duros y enrazados, no se está dilucidando un éxito particular, sino una idea del toreo. La Tauromaquia debe ser una zona de coexistencia y no una praxis del monoencaste.
Caben matices; lo que no cabe es el toro borrego sobre el que se edifican famas y fortunas.”…
4 comentarios:
Pues me parece gran verda.
Cuanta razón lleva Javier Villán con este artículo...
Un abrazo!
Totalmente de acuerdo con Javier Villan. Cuanto cambiaria la historia si las cosas se hicieran como en Francia (exceptuando a Simon Casas y sus plazas).
Graciliano dijo:
Veo -no sin perplejidad- que Vds. entienden lo que quiere decir el Sr. Villán. Yo, sinceramente, no lo entiendo. Posiblemente será mucho pedir que lo vuelvan a leer como si no supieran -previamente- de qué está hablando. Si lo hacen comprobarán que no se entiende.
Nunca me ha gustado que el torero se lleve la faena hecha de casa.
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