jueves, 10 de diciembre de 2009

Y YO ME ALEGRO...

CARTA DE JUAN SANCHEZ-FABRES:


GRACIAS por vuestra sensibilidad, apoyo y solidaridad, porque con ello habéis conseguido que me tiemble el pulso y se me enturbien los ojos con la lágrima contenida a la hora de firmar la solicitud de VACIO SANITARIO para las vacas de COQUILLA.
Vosotros y solo vosotros vais a ser la causa por la que la única rama original que hoy existe de las 4 en que se dividió la ganadería de Coquilla no desaparezca también.
Afortunadamente habéis entendido que el toro de lidia antes que grande y cornalón lo que tiene que ser es bravo.Dado vuestro manifiesto interés me creo en la obligación de explicar las razones que ,me han llevado a tomar soluciones tan radicales:
Desde el año 1973 en que me hice cargo de la ganadería, hemos conseguido sobrevivir a la moda del toro grande con un toro pequeño, a la manía del toro cornalón con un toro cornicorto a la imposición del toro tranquilo con el toro fiero,y a reconocimientos veterinarios que miden el toro con un único patrón, olvidando las peculiaridades de cada encaste; pero el que me obliguen a sacrificar una vaca con 16 años y 32 veces saneada, madre de 2 sementales y un toro de vuelta al ruedo, eso ha sido la gota que ha hecho derramar el vaso.
A partir de ahora os habéis convertido en ganaderos sin quererlo y en el futuro cada vez que salga al ruedo un toro de Coquilla, aunque sea en una novillada sin caballos, algo de él os pertenece, pues al final, sois vosotros los que habéis conseguido que siga existiendo y por eso la familia Sánchez Fabrés os estará eternamente agradecidos.
Vamos a seguir, aun sabiendo que es inútil luchar contra el sistema, porque al encaste de Coquilla al igual que al olmo de MACHADO hendido y partido por el rayo algunas hojas verdes de esperanza le han salido.
Juan Sánchez Fabrés.







Cuando he leído esta carta se me han puesto los pelos de punta. Una alegría inmensa me ha invadido, saber que aún después de todo se sigue luchando por el TORO BRAVO hace que uno recupere, en parte, la esperanza. Así, en Pedro Llen seguirán naciendo, como llevan haciéndolo tres cuartos de siglo, becerros de encaste "coquilla" gracias a ti, Juan.


Foto de Menacho.

5 comentarios:

BERNA dijo...

Se me han puesto los pelos de punta.
Bernardino Basas

Anónimo dijo...

Adelante, Sr.Sanchez Fabres, la grandeza de las obras, se miden por las adversidades a las que se tienen que hacer frente.Hay que hacer causa comun frente a este sistema actual,lleno de burocracia,funcionarios apesebrados y politicos infectos,al final gusanos de la sociedad donde ninguno contacta con la realidad del pueblo soberano. La ciudadania, la sociedad civil está amordazada;creo que es hora de plantar cara a estas termitas sociales.
Me alegro de su rectificación, reciba un cordial saludo de homenaje.

Aragones

emiliolentisco dijo...

¡¡Óle, Óle y Óle los tios valientes !!. Mil reconocimientos al ganadero

raul dijo...

coquilla lo mejor, los grandes toreros y no hace tantos años triunfaron con esos toros.
Los toreros actuales no saben lidiar ni darle sito al toro, todos torean igual, no saben darle sitio al toro, normalmente el toro se los da a ellos.
El toreo actual es una estafa, asi nos va....

ALATRISTE dijo...

Felicidades ganadero! Una ganadería es para disfrutarla pero en estas circunstancias se ve que es dificil. Mucho ánimo y adelante que caminar solo en el desierto sabiendo q se tiene razón es seña de valientes