martes, 8 de julio de 2008

DESENMASCARANDO AL PERSONAL

Acabo de revisar el correo y veo un email en el que Javier Salamanca me adjunta un artículo de sumo interés para que los aficionados vayan viendo quién son los que corrompen la Fiesta.

EN CIUDAD REAL AGONIZA LA FIESTA

Cuando la empresa RUEDOS BRAVOS irrumpió en la plaza de toros de Ciudad Real, muchos pensaban que había llegado el “Mesías taurino” y que las vicisitudes que durante varios años habíamos padecido habían llegado a su término por fin..
A pesar del asedio constante contra la Fiesta de los toros llevado a cabo por instituciones como La Junta de Comunidades de Castilla la Mancha, Excma. Diputación de Ciudad Real, Ayuntamiento, por los taurinillos mafiosos que han explotado nuestra plaza durante estos últimos años o por algunos sectores de la prensa local inepta, la resistencia de unos pocos héroes constituía un reducto difícil de abatir. Atrincherados en los tendidos y con sus abonos en el bolsillo, previo pago en taquilla, repelíamos una y otra vez los encarnizados ataques de aquellos a los que no les interesa para nada nuestra Fiesta o la quieren transformar en una pantomima auténtica.
La táctica de los todopoderosos ejércitos asediadores eran auténticamente de generales estrategas y de puro desgaste. Primero nos cortaron el suministro de toros dejando pasar solo aquellos deshechos indignos para una plaza de segunda categoría; colocaron en el palco a un tragaldabas de tres al cuarto que repesca en los corrales todo lo que rechazan los veterinarios, repartiendo orejas a diestro y siniestro cual agricultor reparte frutas y hortalizas al pueblo a las puertas del Ministerio de Agricultura y Pesca en señal de protesta, solo que este individuo protesta contra el pueblo (lo de las orejas y los rabos quizás lo haga para aligerar de peso al tiro de mulillas); contrataron empresarios mafiosos que nos hicieron ampliar nuestro círculo de amistades trayéndonos feria tras feria a los mismos toreros y que nada o casi nada nos aportan con su tauromaquia, léase Rivera, Manolo Díaz, Jesulín, Víctor Puerto, Anibal Ruiz, Luís Miguel Vázquez, etc, etc, así año tras año; nos reducen esta temporada el número de festejos y no conformes con esto, como guerreros desalmados, aumentan el precio de las localidades en mas de un 100% en plena “desaceleración del crecimiento” (CRISIS ZP, CRISIS TOTAL). A todo esto, en retaguardia, la prensa local hace críticas de los festejos como si lo que ocurriera en el ruedo fueran acontecimientos históricos en el ámbito de la tauromaquia.
Ante este panorama, los defensores sitiados y desanimados, nos planteamos enarbolar bandera blanca y rendirnos sin condiciones, pedimos refuerzos, mandamos S.O.S, nos replegamos, nos escasea la munición, la afonía nos hace mella y…………….. cuando todo parece perdido, observamos con perplejidad que los que nos tienen rodeados se acercan con una sábana blanca en señal de reconocimiento a nuestra heroica defensa.
El júbilo se desata entre los maltrechos defensores, todo son abrazos, parabienes, felicitaciones, ¡Se rinden ellos! y como regalo nos traen como griegos a troyanos un “Caballo de madera” en forma de empresa, “RUEDOS BRAVOS”, si, si, a Miranda, Chicote y Garzón.
Esperamos pacientemente antes de abrirles las puertas, cuando plantean su idea de temporada para nuestra plaza, nos hablan de toreros, de toros, de repercusión mediática y algunas cosas mas, al final les abrimos las puertas para que metan el “Caballo”, todo parece normal, aparentemente es un regalo, lo miramos con expectación, le observamos encantados, pero ya estaba dentro.
El día de la Corrida Extraordinaria de Beneficencia, cuando la afición mas relajada estaba vaticinando una gran tarde de toros y en los tendidos se vivía el ambiente de las grandes tardes saboreando el triunfo de la resistencia, de las entrañas del “Caballo” se abre una trampilla y se descuelgan unas lianas por las que descienden lo que jamás hubiéramos imaginado, toritos horriblemente presentados, descastados, sin raza, sin un ápice de fuerza, afeitados hasta las trancas (había que verlos), escandaloso, los picadores sino hubieran salido no habría pasado nada, toreros desganados, alguno vestido peor que un becerrista, otros bullangueros de plazas de carros, el señor del palco en su línea anterior, mandando música y repartiendo orejas y mas orejas por mantazos, trapazos, carreras y mas carreras, bajonazos infames y espadas que hacían guardia y encima nos enteramos que nuestros aliados (los veterinarios) han ido invitados por la Empresa a Sevilla a ver los toros, todo de gañote, viaje, viandas y lo que se terciara, horrible todo. Ahora si estamos tocados.
Nos habían engañado y ahora nos tienen rodeados y con un foco de expertos guerrilleros enemigos dentro, ¿podremos resistir la feria?, lo vamos a intentar aunque estamos heridos de muerte, exhaustos, agónicos. ¡AYUDA!, ¡SOCORRO!, ¡S.O.S., ¡HELP!, ¡QUE NOSOTROS NO HEMOS RAPTADO A HELENA! que Ciudad Real taurinamente se muere. Si no podéis o no tenéis medios al menos mandarnos un sacerdote para que “Dios nos pille confesados”.

Tomás Mata

Presidente de la Asociación Taurina
“EL 7 DE CIUDAD REAL”

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